Las ocho claves de la educación danesa

Como parte de Escandinavia, el reino de Dinamarca es el más pequeño y meridional de todos los países nórdicos del continente europeo. Formada por tres regiones autónomas las unas de las otras (la propia Dinamarca y sus dos territorios de ultramar, Groenlandia y las Islas Feroe) este país miembro de la Unión Europea, aunque no de la zona euro, goza también de uno de los más efectivos y modernos estados del bienestar del mundo y, además, de uno de los índices de corrupción más bajos del planeta. Un sistema socioeconómico, que repercute de forma decisiva en la visión que los daneses tienen de su propio país y que garantiza la cobertura universal de todas las necesidades de sus habitantes como, por ejemplo, el derecho a una educación. Una formación que destaca en los índices internacionales por su gratuidad, su elevada calidad y su reputación dentro y fuera de sus fronteras. Pero ¿cuáles son las particularidades de este sistema educativo tan reconocido?

Las ocho claves de la educación danesa

El sistema educativo danés opta por una formación completa y global, que abarca todos los aspectos de la persona más allá de los conocimientos académicos que puedan cubrirse curricularmente. La enseñanza danesa se plantea como un instrumento que promueve la democracia y la igualdad, a través del diálogo y la colaboración entre sus alumnos, sin olvidar que debe proporcionar el posible acceso a una formación superior y al mercado laboral.

La enseñanza danesa es obligatoria entre los siete y dieciséis años, aunque la mayoría de alumnos prosiguen sus estudios pasado este periodo de obligado cumplimiento. Mientras los niños y niñas daneses alcanzan la edad mínima de escolarización obligatoria, pueden asistir a guarderías hasta los tres años y, desde ese momento hasta los seis años, al jardín de infancia. Igualmente, es habitual que los alumnos de cinco años de edad cursen un curso voluntario de preescolar antes de empezar a cursar sus estudios de primaria un año después.

El sistema de estudios danés está dividido en tres etapas: la enseñanza primaria, que es obligatoria en su totalidad, la secundaria y la superior. Lo que por un lado implica que la educación primaria danesa abarque de los seis a los dieciséis años del alumnado mientras que la secundaria vaya desde esos dieciséis (o diecisiete, dependiendo del mes de nacimiento del alumno en cuestión) hasta los diecinueve. Por otra parte, la educación superior en Dinamarca se bifurca en tres tipos de estudios diferentes: los universitarios, que pueden alcanzar los cinco años de duración, los de formación profesional, que se prolongan durante cuatro años, y el académico profesional, que dura un total de tres.

El Ministerio de Educación danés es el encargado de fijar los objetivos, áreas de conocimiento, competencias, niveles de exigencia curriculares, planes de estudio… Mientras que los municipios daneses se ocupan de lo concerniente a la escolarización obligatoria de las escuelas municipales: su economía y su inspección. Por otro lado, las provincias se ocupan de las escuelas de educación secundaria que se encuentren bajo su jurisdicción, aunque siempre bajo la supervisión del Ministerio de Educación en lo que a contenidos educativos y reválidas se refiere. Los planes de estudio superiores, así como sus objetivos y duración de los mismos, son determinados por el propio centro pese a que, una vez más, lo hagan dentro de los márgenes establecidos por el Ministerio de Educación o, en el caso de los de larga duración como puedan ser los universitarios, por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación.

El danés es el idioma oficial en Dinamarca, lo que lo convierte en la lengua oficial del sistema educativo del país. Aún y así, y con la conciencia de la importancia del inglés en el futuro laboral de sus alumnos, este idioma se imparte como una asignatura obligatoria desde los primeros años de la educación primaria. En consonancia, muchas universidades ofrecen titulaciones en este idioma.

La práctica totalidad del sistema educativo de Dinamarca está enfocado hacia el aprendizaje para toda la vida (más conocido por su traducción al inglés Longlife learning) que empieza en los primeros años de su alumnado y prosigue durante la vida profesional de los daneses, con numerosas iniciativas formativas destinadas a la formación vocacional y no formal para adultos.

La mayoría de profesionales de la docencia en Dinamarca está formada por mujeres. Concretamente, y según cifras del 2016, por un 70,9% del total de la profesión, lo que supone un incremento respecto a la media de la Unión Europea, que sitúa la preponderancia femenina en la docencia en un 67,8%.

Probablemente debido a la fortaleza y buen funcionamiento del estado del bienestar danés, la contratación de docentes por parte del estado en Dinamarca representa un 84,8% del total, dejando en un 15,2% la contratación por parte de gestores privados, ajenos al estado. Lo que, de nuevo, sitúa Dinamarca un poco por encima de la media de los países de la Unión Europea, que se encuentra en el 82,3% de contrataciones hechas desde lo público.